Santos Ponciano e Hipólito
Santos Ponciano e Hipólito fueron mártires italianos de la fe. Aunque ambos morirían en una mina de sal en Cerdeña, sus vidas de antemano no podrían haber sido más diferentes. San Ponciano fue Papa antes de renunciar al papado y ser forzado al exilio por el emperador Maximiano. Por otro lado, Hipólito tiene la distinción de ser el primer “antipapa”, aunque también se vio obligado a extraer sal en la isla de Cerdeña. Mientras estaba en las minas, Hipólito se reconcilió con la Iglesia y fue martirizado junto a San Ponciano.