Nuestra Señora de Guadalupe
Nuestra Señora de Guadalupe se apareció a San Juan Diego en México en 1531. Nuestra Señora le pidió que fuera su mensajero especial y proporcionó pruebas de sus encuentros para un obispo escéptico en forma de dos signos: una capa llena de rosas frescas en diciembre y una imagen milagrosa de sí misma sobre la tilma de Juan Diego (o manta). Nuestra Señora de Guadalupe nos enseña que el amor de Dios por los pobres es una verdad histórica que proviene del Evangelio mismo. El 12 de octubre de 1945, el Papa Pío XII decretó Nuestra Señora de Guadalupe será "Patrona de todas las Américas".